Nacida en Barcelona e hija de la pianista Pilar Marín, Cristina Casale inició sus estudios de piano con su madre a los cuatro años y creció en un hogar en el que nunca faltó la música, especialmente la española.
Rodeada de partituras de un repertorio exquisito, siempre sonaron las mejores interpretaciones y los más grandes maestros. Formada inicialmente en el Conservatori del Liceu de Barcelona, completó su educación musical con Alicia de Larrocha, una de las pianistas más destacadas del siglo XX.
De su primera etapa, destacan su debut en el Palau de la Música Catalana, diversos premios, especialmente por sus interpretaciones de música española, en pequeños concursos internacionales, en España (Berga, Manresa y Barcelona) e Italia (Camillo Togni) y sus conciertos en distintas ciudades de Europa.
Gracias a su amplia formación, Casale unifica perfectamente dos de las técnicas pianísticas más relevantes que existen: la técnica rusa del Conservatorio de Moscú, que aprendió con las prestigiosas profesoras Ilze Graubin e Irina Zaritzkaja; y la técnica francesa, con el pianista y pedagogo Emmanuel Ferrer-Laloë, con quien posteriormente formó un dúo de pianos, ofreciendo recitales en España, Francia y Portugal.
En 2004, Cristina Casale toma una de las decisiones más importantes de su vida: priorizar su familia. Consecuente con ello, reduce drásticamente su actividad de concertista y decide enfocarse en la enseñanza, otra de sus grandes pasiones.
Diez años más tarde, vuelve a los escenarios con una gira por los Estados Unidos en la que destaca su debut en el Carnegie Hall de Nueva York. La gira, con un repertorio de música española cuidadosamente seleccionado por la misma Casale, tuvo un gran acogida.
En 2016 conoce al compositor Abraham Espinosa y queda fascinada por lo que considera todo un descubrimiento en la Historia de la Música Española: los primeros Estudios de concierto para piano de influencias flamencas.
Dos años más tarde nace Duende, un proyecto personal en el que vincula la obra de Espinosa con la de grandes compositores españoles del pasado, entre ellos Falla, Granados y Albéniz.
En marzo de 2019, Casale lleva Duende a China. La gira, que pasa por las principales ciudades del país, es todo un éxito y recibe un gran reconocimiento por parte de crítica y público.
Con una extensa experiencia de más de 25 años en los escenarios, Cristina Casale trabaja cada repertorio hasta el más mínimo detalle artístico. En cada concierto deja una huella personal diferenciadora, siempre destacando por su naturalidad y por la conexión especial que crea, ya no solo con sus programas, sino con el público.
A parte del dúo de pianos con Ferrer-Laloë, Casale ha tocado en dúo con el violinista portugués Nuno Soares y también con la flautista Patricia de No. Asimismo, ha sido miembro del cuarteto Intimate, una formación de cámara especializada principalmente en repertorios de jazz.
Actualmente, Cristina Casale centra su carrera como concertista y orienta su actividad musical en Duende, difundiendo así la música de Espinosa.
En 2019, Casale ha sido galardonada con la Gran Cruz de Oro de la Asociación de Fomento Europeo por su labor de difusión cultural y social.
El poder más grande de la música reside en su transversalidad.
Puede llegar a cualquier corazón: la música nos llena, nos emociona, ¡nos libera!
